La Evaluación del Desarrollo es un proceso clínico esencial para medir el progreso de un niño en áreas clave como el desarrollo cognitivo, motor, social y emocional. Según la American Academy of Pediatrics (AAP), "la evaluación del desarrollo debe realizarse de manera periódica para identificar tempranamente posibles retrasos en el desarrollo, permitiendo una intervención oportuna y adecuada" (AAP, 2019). Este tipo de evaluación es crucial para detectar, desde una edad temprana, cualquier desajuste o retraso que pueda afectar el bienestar futuro del niño.

En Bienestando, el proceso de evaluación se lleva a cabo utilizando herramientas estandarizadas y pruebas especializadas, adaptadas a la edad y características individuales del niño. El objetivo es crear una imagen integral del desarrollo infantil, considerando aspectos como las habilidades motoras finas y gruesas, el lenguaje, las interacciones sociales, y el comportamiento adaptativo. A través de un enfoque centrado en el niño, se identifican sus fortalezas y áreas que requieren apoyo adicional, permitiendo diseñar un plan de intervención adecuado y personalizado.

Durante la evaluación, nuestros especialistas observan la conducta del niño en diferentes escenarios, ya sea en sesiones individuales o en grupos, lo que proporciona una visión completa de su capacidad para desenvolverse tanto en entornos estructurados como no estructurados. Además, se realizan entrevistas detalladas con los padres y se recopilan informes de maestros o cuidadores para tener una comprensión profunda del entorno del niño.